Visita del prior general de los Agustinos Recoletos a las comunidades de México. Septiembre-Octubre 2024.

El prior general de los Agustinos Recoletos, Miguel Ángel Hernández, ha finalizado su visita oficial a las comunidades de la Orden en México, a los miembros de la Familia Agustino-Recoleta y a los colaboradores y agentes pastorales. Ha dejado un mensaje de ánimo y de esperanza para todos.

La madrugada del 15 de septiembre, en plena fiesta de la independencia mexicana, llegaba a México el prior general de los Agustinos Recoletos, Miguel Ángel Hernández, acompañado del secretario, Luciano Audisio. Tenían por delante una apretada agenda para las siguientes cuatro semanas.

El objetivo era realizar la visita oficial de renovación a las comunidades recoletas y también reunirse y encontrarse con los miembros de la Familia Agustino-Recoleta (monjas contemplativas, religiosas de vida activa, miembros de la Fraternidad Seglar y de las Juventudes Agustino-Recoletas) y con los agentes laicos de evangelización, miembros de los equipos directivos y de gestión, colaboradores y trabajadores de los ministerios.

La visita ha durado cerca de un mes, con presencia en las 13 comunidades recoletas y encuentros comunitarios y personales con los 60 religiosos presentes en ellas, además de con los aspirantes y postulantes de las casas de formación y con los órganos de gestión de los ministerios (consejos parroquiales, dirección del Colegio Fray Luis de León y de CARDI)

El prior general también ha hecho una visita de cortesía a 11 de los 15 monasterios contemplativos de la Recolección femenina en el país y a las dos comunidades de Misioneras Agustinas Recoletas, situadas en Ciudad de México y Querétaro.

La visita comenzó en la comunidad de Tecamachalco, sede de la Vicaría de México y Costa Rica, situada en Naucalpan (Estado de México), que atiende las parroquias de Madre de Dios de Czestochowa, Nuestra Señora de Lourdes y San Miguel Arcángel. El prior general y el secretario compartieron misa y mesa con la comunidad contemplativa del Sagrado Corazón de Jesús, situada a tan solo kilómetro y medio de la comunidad masculina.

El miércoles 18, previa visita a los monasterios de Tlaxcala y Cuautinchán (Puebla), el prior general se hizo presente en la Asamblea de la Federación de Agustinas Recoletas de México en Puebla. Escuchó las inquietudes de las monjas, encomendó la Orden a sus oraciones, agradeció al agustino recoleto Gerardo Ruiz su labor como asistente espiritual de la Federación y conoció a Olivia García, nueva presidenta federal salida de esta Asamblea.

El prior general visitó a continuación el Postulantado San Agustín de Ciudad de México, donde se reunió con el equipo de formación, los postulantes y la Fraternidad Seglar. La festividad de san Alonso de Orozco le dio pie a reflexionar sobre cómo la vida comunitaria es un pilar fundamental de la espiritualidad agustiniana. También visitó el monasterio contemplativo de Nuestra Señora de la Consolación de Mimosas, Ciudad de México.

Del 22 al 27 de septiembre los visitadores se trasladaron al Estado de Chihuahua para visitar oficialmente las comunidades de La Junta, Cuauhtémoc, Delicias y Chihuahua. El prior general reconoció y agradeció la tarea evangelizadora de casi 60 años de los Agustinos Recoletos en esa zona norte de México.

El lunes, en La Junta, conoció de cerca el trabajo en la Sierra Tarahumara, con testimonios que le inspiraron un profundo reconocimiento del trabajo con los más vulnerables. En la capital chihuahuense, sin embargo, tuvo acceso al trabajo pastoral de un entorno plenamente urbano con sus propios desafíos, entre ellos el migratorio.

Los últimos días de septiembre visitó las parroquias de Churubusco y Hospitales. En esta nueva estadía en la Ciudad de México visitó el proyecto socio-sanitario CARDI y la comunidad MAR, incluyendo su tarea social en el asentamiento informal de Las Vías.

La primera semana de octubre el prior general estuvo en Querétaro. En la Casa San Pío X tuvo especial empeño en compartir tiempo y diálogo con los religiosos mayores y presidió la profesión solemne del agustino recoleto José Antonio Hernández. Se reunió con los equipos de gestión, docentes y alumnos del Colegio Fray Luis de León. Y pudo celebrar con la Fraternidad Seglar Santa Magdalena de Nagasaki sus 15 años de existencia.

En la comunidad de Lomas de Casa Blanca además de visitar a los religiosos recoletos se reunió con el equipo de gestión parroquial y visitó a la comunidad de Misioneras Agustinas Recoletas. Desde Querétaro pudo visitar otros tres monasterios contemplativos: Tula, Jalpan y Ahuacatlán.

La siguiente semana volvió por tercera vez a la Ciudad de México, donde le quedaban dos comunidades recoletas que visitar: Avante y Santa Mónica, donde celebró la festividad de santo Tomás de Villanueva.

También visitó la cercana comunidad de Cuernavaca (Morelos), donde además de la parroquia conoció las instalaciones de la Finca Centenario y de la Finca Recolección (donde se llevan a cabo múltiples tareas del Centro de Espiritualidad Agustino-Recoleta), y otro monasterio de contemplativas. El miércoles tuvo ocasión de participar en el habitual encuentro fraterno de los religiosos del centro de México con deporte, descanso y comida comunitaria para celebrar varios cumpleaños.

Los últimos días de estancia en México, Miguel Ángel y Luciano visitaron a las contemplativas de Texcoco y Tepeyahualco y disfrutaron de la cultura mexicana en el centro arqueológico de Teotihuacán y el exconvento agustino de San Agustín de Acolman.

“Quiero escuchar de primera mano la historia de los distintos lugares donde estamos, el trabajo que llevamos a cabo, los desafíos que enfrentamos y, por supuesto, los sueños y proyectos que tenemos”, dijo el prior general antes de llegar a México. Este deseo se cumplió con creces.

“Cada comunidad que he visitado refleja la riqueza del carisma agustino recoleto. Desde el servicio pastoral en los hospitales hasta la formación de los jóvenes en nuestros colegios, veo cómo el amor de Dios se manifiesta en obras concretas.

Estoy profundamente agradecido por la entrega de cada hermano que, con su vida, testifican que el Evangelio sigue transformando corazones y realidades. Los animo a seguir siendo una luz de esperanza para todos aquellos que nos necesitan”.

Tras varias semanas en México, la visita oficial del prior general continúa ahora por las comunidades recoletas en Estados Unidos.