Unos 800 alumnos desde 1º de Primaria a 1º de Bachillerato, del 4 al 14 de junio, fueron protagonistas activos y testigos de diversas actividades para tomar conciencia de la vocación cristiana y formarse en la cultura vocacional.
La semana comenzó con una oración pata resaltar el llamado de Dios, escuchando el Evangelio de la llamada de Jesús a Zaqueo y concluyendo con la canción propuesta por JMOV+VN 2024 “Ser misión“. Después se explicó a los alumnos qué significa la palabra vocación y se presentó el plan de actividades de la semana vocacional.
El lema propuesto para la semana vocacional en el Colegio Romareda, dirigido por los Agustinos Recoletos, fue el mismo planteado por la Jornada Mundial de Oración por las vocaciones: Dios te llama. Cada día de la semana se ofreció una actividad que resaltara el llamado a la vocación. Las frases clave fueron: “Dios te llama a ser feliz”, “Dios te llama a conocer a su Hijo”, “Dios te llama a seguir a su Hijo”, “Dios te llama a servir” y “Dios te llama a anunciar a su Hijo”.
Los alumnos de 1º y 2º de la ESO realizaron una dinámica para conocer el llamado de Dios a vivir y en conocer el plan que tiene preparado para cada uno de nosotros.
Para resaltar el llamado a la felicidad se realizó un cineforum en todas las etapas educativas del Colegio con la denominación 2º Jornada de Cine espiritual. Los alumnos de 1º Bachillerato comentaron la película Sound of freedom; 4º de la ESO el documental Amén, Francisco responde; por su parte los alumnos de 3º se asombraron de varios testimonios de conversión cristiana de la serie Contagiosos; por otro lado, alumnos de 2º de la ESO vieron el documental El cielo no puede esperar”, sobre el beato Carlos Acutis y, finalmente, los alumnos de 1º de la ESO disfrutaron de la película La Cabaña, que trata la experiencia de amor de Dios Uno y Trino. En la etapa de Primaria vieron varias historias bíblicas de la serie Superlibro: Rut, Job, Josué, David, Daniel, Gedeón y los milagros de Jesús.
Una actividad muy bonita para la etapa de Primaria consistió en celebrar el llamado de Dios a ser felices a través del 2º festival de la alegría, en el que cada curso preparó, ensayando por semanas, una canción cristiana para alabar a Dios bailando y cantando. Las canciones seleccionadas pertenecen a la colección “Pequeños héroes”, que resalta las virtudes de personajes del Antiguo Testamento. Se creó un ambiente de comunidad, amistad, alegría y de alabanza.
A los alumnos de 1º y 2º de Primaria se les mostró una exposición fotográfica de la misión agustino-recoleta en Sierra Leona y los demás cursos de Primaria conocieron con detalle la misión agustino-recoleta en China.
Asimismo, tanto los alumnos de Primaria como de la ESO contaron con la visita de los novicios agustinos recoletos de Monteagudo (Navarra), que resaltaron, a través de dinámicas y bailes, el llamado a conocer a Jesús y a seguirlo. Este mismo mensaje fue llevado por misioneros laicos que colaboran con las Obras Misionales Pontificias de la Archidiócesis de Zaragoza, a todos los alumnos de la ESO a lo largo de dos días.
La llamada a anunciar a Jesús quedó a cargo de testimonios de misioneros laicos. Agradecemos a Pititia Servera, médico de profesión y que lleva más de veinte años siendo misionera laica en varios países del mundo; a Jorge Viejo, un bombero aragonés, quien compartió su experiencia misionera en Honduras, y a la hermana Leonor Flores, misionera comboniana en varios países, incluido Eritrea en tiempos de guerra.
Respecto a la llamada a servir a los demás quedó a cargo de Nacho Ciprés, un cristiano comprometido que animó a los alumnos de 1º de Bachillerato a dedicar parte de su tiempo a servir a los demás, en concreto en la ONG Cooperación Internacional.
Las clases de 3º y 4º de la ESO vieron la exposición “ponle cara al voluntariado” en colaboración con la Coordinadora Aragonesa de Voluntariado. Se animó a los alumnos de hacer voluntariado en más de cien asociaciones en Zaragoza.
Finalmente, es preciso dar las gracias al equipo de Pastoral del Romareda, que ha animado la semana para suscitar una cultura vocacional; a los alumnos, por su implicación y al profesorado, por participar y cuidar el orden en las actividades.