Peregrinación a Santiago 2024. Colegio San Agustín. Valladolid. Agustinos Recoletos.

Diecinueve jóvenes que han hecho este 2024 su Confirmación, acompañados de tres profesores y dos religiosos agustinos recoletos, han hecho los últimos cien kilómetros del Camino de Santiago francés y han ganado la Compostelana.

Por segundo año consecutivo, alumnos de 1º y 2º de Bachillerato (16 a 18 años) del Colegio San Agustín de los Agustinos Recoletos en Valladolid que durante el curso 2023-2024 han recibido el sacramento de la Confirmación han realizado la última parte del Camino de Santiago francés del 4 al 8 de julio, finalizados los exámenes, el curso lectivo y las pruebas de acceso universitario.

El grupo de peregrinos estaba formado por 24 personas, entre ellos tres profesores y dos religiosos recoletos de la comunidad de Valladolid. Han caminado el último centenar de kilómetros desde Portomarín (Lugo) hasta Santiago de Compostela (La Coruña).

Ha sido una experiencia agradable y gratificante. Los peregrinos han aguantado muy bien el camino, hecho a buen ritmo y sin incidentes de importancia gracias a la preparación previa.

Aunque el grupo salió muy temprano desde Valladolid, la marcha se inició la primera jornada un poco más tarde de lo conveniente y recomendable. En Gonzar repusieron fuerzas y descansaron hasta que pasasen las horas más calurosas del día y menos cómodas para caminar.

En la segunda jornada caminaron más despacio hasta que un almuerzo con pulpo les hizo emprender la segunda parte con más ánimo. Llegaron a Arzúa tras superar una importante cuesta. El albergue era más antiguo y con menos lujos, pero la comida fue exquisita y abundante. Aún hubo tiempo para ver uno de los partidos de la Eurocopa.

La siguiente etapa fue hasta Arca o Pedrouzo, que de las dos formas se denomina. Allí el albergue dispone de piscina, muy de agradecer para el descanso y la relajación muscular tras la marcha.

El último día la etapa era de 20 kilómetros y se quería llegar a tiempo para la misa de peregrinos en la Catedral compostelana, en la que los peregrinos vallisoletanos colaboraron leyendo las lecturas. Tras la comida hubo un reconfortante paseo por la ciudad del Apóstol.

Fueron días especiales en un entorno lleno de arte, historia y fe. La peregrinación invita a la solidaridad, al encuentro personal, al apoyo mutuo y al recuerdo de los empobrecidos y excluidos asumiendo el compromiso de construir un mundo mejor entre todos.