Del 10 al 16 de junio de 2024 las monjas agustinas recoletas de la Federación mexicana tuvieron un taller en la Casa de la Recolección, ubicada en Ahuatepec, Morelos, México, con el objetivo de facillitar el autoconocimiento y las relaciones dentro de las comunidades.
Se dice que en la antigua Grecia, cuando uno de los primeros siete sabios de la antigüedad preguntó al oráculo de Delfos qué era lo mejor que podía aprender de los hombres, la respuesta que recibió fue: “Conócete a ti mismo”. Siglos más tarde san Agustín (354-430) escribió: “¿Cómo puedes acercarte a Dios, cuando estás tan lejos de ti mismo?”. Y el Obispo de Hipona se dirigió a Dios con las siguientes palabras: “Señor, que me conozca a mí y que te conozca a ti”.
Con suficiente antelación el Equipo de formación de la Federación envió a las comunidades la invitación para que participaran en este curso-taller de formación permanente, al que asistieron de forma presencial 40 hermanas de votos solemnes de diferentes monasterios: Ciudad de México, Cuautinchan en el estado de Puebla, Cuernavaca en el estado de Morelos, Macuxtepetla en el estado de Hidalgo, Morelia en el estado de Michoacán, Papalotla en el estado de México, Puebla, en el estado de Puebla, Tlaxcala en el estado de Tlaxcala, Tula en el estado de Hidalgo y Xalapa en el estado de Veracruz. Además, en la modalidad virtual participaron en el taller los monasterios de Bogotá, Pozos de Santa Ana (San José de Costa Rica), Lodwar en Kenia y los mexicanos de Lomas de Tecamachalco, Manuel Doblado en el estado de Guanajuato y algunas hermanas de Macuxtepetla.
La doctora Guadalupe Jazmín López Cáceres, egresada de la Universidad de Lumen Gentium, impartió el temario del taller titulado “Reconociendo mi ser”.
Con un lenguaje sencillo y claro fue introduciendo a las cursillistas en este intenso taller y les proporcionó los conocimientos teóricos psicológicos en una cabalgada por la historia de la psicología que ya tiene en los grandes filósofos griegos Platón y Aristóteles, elementos de gran valor, porque ellos ya se hicieron importantes preguntas respecto a qué es el ser humano, llegando a la conclusión de que debía existir un “alma”, realidad diferente del cuerpo.
Doña Guadalupe trató de dejar muy clara la diferencia entre enfermedades y trastornos mentales, con la intención de que las participantes pudieran discernir sus estados anímicos: reacciones, sentimientos, emociones, etc., y de dónde brotaban, para poder afrontarlos, sanarlos y ayudarse unas a otras, de modo que las relaciones comunitarias resultaran más serenas y amables.
Igualmente, la ponente disertó brevemente sobre los conceptos temperamento (como instancia innata), carácter (instancia que hay que forjar) y personalidad (combinación de los dos anteriores) y las diferencias entre uno y otro.
En fin, fueron tres días de conocimiento teórico que les ayudó a trabajar durante el resto de la semana en diferentes dinámicas personales y grupales.
La doctora Jazmín siempre estuvo muy abierta a recibir preguntas, a solventar dudas y compartir con las asistentes.
Las monjas agustinas recoletas se muestran muy agradecidas a la doctora Guadalupe por sus charlas; al vicario de México-Costa Rica Martín Luengo por facilitarles la casa del encuentro; a fray Ignacio Jiménez Castellanos, que estuvo pendiente para que no les faltara nada, y al asistente de la Federación mexicana, el agustino recoleto Gerardo Ruiz, que les celebró la misa durante estos días del taller.