Reseña histórico-biográfica de algunos de los principales personajes de la Provincia de San Nicolás de Tolentino de la Orden de Agustinos Recoletos desde su fundación hasta la actualidad.
Nació en Igea de Cornago, La Rioja, España. Tras ingresar en la Orden, llegó a Manila en 1858, al año siguiente fue ordenado sacerdote y destacó por su oratoria y su dominio del tagalo. En 1876 regresó a España como vicario provincial y procurador general.
En 1877 la Provincia le encomendó la compra de San Millán. El 1 de septiembre de 1878 se establece la comunidad y al año siguiente Minguella es nombrado prior.
Con su empeño, el cercano monasterio de Valvanera es rehabilitado, así como repuesta la imagen de la patrona de La Rioja. Hoy Valvanera es Bien de Interés Cultural y San Millán es Patrimonio de la Humanidad.
La reina María Cristina de Habsburgo-Lorena lo presentó para el obispado de Puerto Rico y León XIII expidió la bula de su nombramiento. El 5 de agosto de 1894 fue ordenado obispo en Marcilla.
Su estancia en la isla caribeña fue corta. Regresó a España en 1898 y la misma reina lo propuso como obispo de Sigüenza (Guadalajara), que contaba entonces con unos 4.500 habitantes.
Durante diecisiete años favoreció la presencia en su Diócesis de comunidades religiosas, entre ellas de los Agustinos Recoletos, que en 1909 establecen una casa noviciado de la nueva Provincia de Santo Tomás de Villanueva en Berlanga de Duero (Soria).
Es recordado en esta Diócesis por su cuidado pastoral, las visitas pastorales y la publicación de numerosas cartas y circulares. Dejó también un legado cultural con su Historia de la Diócesis de Sigüenza y sus obispos en tres volúmenes, elaborados a partir del archivo de la catedral seguntina. También publicó Santa Librada virgen y mártir, patrona de Sigüenza. Estudio histórico.
Por su condición de senador del Reino de España por la provincia eclesiástica de Santiago de Cuba (1896-1898) y por la de Toledo (1899-1900) tuvo que intervenir en las cuestiones sociales y políticas diversas.
A los ojos y al corazón de Minguella no le fueron indiferentes ni los sitios por los que pasó ni el amor que sentía por todo lo recoleto. Escribió, entre otros libros, la Biografía del Ilmo. Sr. D. Fr. Ezequiel Moreno y Díaz, una selección en dos tomos de Cartas de Ezequiel Moreno y el Compendio de la vida y virtudes de la Madre Mariana de San José. Igualmente, escribió sobre San Millán y Valvanera. Su Ensayo de gramática hispano-tagala realza su figura como filólogo.
A monseñor Toribio no le faltaron los achaques en los últimos años de su vida. Una vez que presentó la dimisión, se retiró a Marcilla. Fallece en Cintruénigo (Navarra) durante un desplazamiento a Monteagudo, donde descansan sus restos mortales, muy cerca de su admirado san Ezequiel.