Gregorio Li y Lucas Yuo en un colegio de Pamplona

Los misioneros agustinos recoletos llegados en el año 1924 a China escucharon con gozo especial la petición de los que serían los primeros agustinos recoletos chinos. El año 1935 José Shan, Gregorio Li y Lucas Yuo les presentaron su solicitud de ser recibidos como novicios. Habían recorrido un camino de seis años acompañados por los misioneros en Kweiteh (hoy Shangqiu)

Los jóvenes de China
con ansia misionera
Ya empuñan la divina
Bandera de la Cruz;
Y avanzan al impulso
De ardores soberanos
Llevando a sus hermanos
La salvadora luz.

Aurelio La Cruz, Himno dedicado a nuestros seminaristas de Palawan, I. F. y China
en Todos misioneros

Misioneros formadores

Era el año 1944. Dos jóvenes agustinos recoletos han llegado al colegio de la Compañía de María Inmaculada en la ciudad de Logroño (ver foto). Dista esta ciudad unos 40 kilómetros del pueblo de Lodosa, en Navarra, donde se encuentra el colegio apostólico o seminario de la Orden de Agustinos Recoletos. Allí residen los dos frailes chinos mientras esperan su regreso a la misión de China, con su sacerdocio recién estrenado. Permanecerán en Logroño desde el 15 de octubre hasta el 18 dedicados intensamente a la propaganda misional, visitando numerosos colegios. El día 17, a través de las ondas de Radio Rioja, los habitantes de la ciudad escuchan a Fr. Lucas Yuo su mensaje misionero -al día siguiente lo haría Gregorio Li-. Llegaron desde Roma -donde cursaron los estudios eclesiásticos en el colegio de Propaganda Fidei- hace algo más de un año. Una vez que “dominan suficientemente el castellano para poder actuar en público”, según reconoce el director nacional de Obras Misionales Pontificias, han estado en numerosas ciudades colaborando en la difusión de la obra misional de la Iglesia: Pamplona, Tudela, Tarrasa, Barcelona… Fr. Lucas en Pamplona (Foto) y en esos días de su estancia en Logroño no puede menos que evocar con emoción que está en la tierra en la que nacieron sus padres en la fe: los misioneros agustinos recoletos de la misión de Shangqiu. Por eso incluye, en su mensaje radiofónico a los riojanos, la alabanza y el recuerdo de los misioneros paisanos de los oyentes:

…los celosos Misioneros de nuestro Vicariato en China, Padres Fr. Arturo Quintanilla, Fr. José Martínez, Fr. Julián Sáenz, Fr. Guillermo Ugarte y Fr. Joaquín Peña: quien, además de Misionero, fue nuestro Maestro durante los difíciles años de nuestra primera formación en el Seminario Menor de nuestra Misión”
(Lucas Yuo, Mensaje de un Padre Chino en Todos misioneros 1944)

Joaquín Peña representa para él a los maestros que fueron guía y estímulo en su vocación para ser agustino recoleto y sacerdote misionero. Lo mismo hubieran dicho los numerosos niños que se formaron en el seminario de la misión (hasta 80), 17 de ellos llegarían a ser agustinos recoletos.

Cada uno de aquellos misioneros llegados desde España hasta China eran distintos en el temperamento, en cualidades y aficiones, pero todos ellos vivían con entusiasmo y ardor su misión evangelizadora en China. Todos también ponían esfuerzo y dedicación especial en la atención a los niños y jóvenes que, arrastrados por su ejemplo, querían ser como ellos: misioneros del evangelio. Enfrentados a ese desafío de formación recordaban y repasaban todo lo que ellos mismos habían recibido años antes en sus años de formación y estaban pendientes de las orientaciones que la Iglesia daba a todos los responsables de la formación en seminarios y casas religiosas.

En comunión con la Iglesia

Cuando los agustinos recoletos llegan a China en el año 1924 la Iglesia universal está comprometida especialmente con las misiones. Dos años antes había sido elegido Pío XI, el Papa de las Misiones. Será el que canonice en 1925 a Teresa de Lisieux, declarada patrona de las misiones, y muy presente en la devoción de los misioneros agustinos recoletos de China. Él establecerá unas directrices en su encíclica Rerum Ecclesiae. Ya había demostrado claramente su libertad para servir a la Iglesia con decisiones nuevas desde el principio de su pontificado; por ejemplo, nombrando a una mujer y seglar al frente de la Casa pontificia. Sus directrices incluían lo que su predecesor, Benedicto XV, ya había establecido respecto al clero nativo:

es de lo más principal e imprescindible, para quienes tienen a su cargo el gobierno de las Misiones, el educar y formar para los sagrados ministerios a los naturales mismos de la región que cultivan; en ello se basa principalmente la esperanza de las Iglesias jóvenes (Maximun illud 30).

Pio XI asegura que su propósito desde que comenzó a ser papa era la evangelización en los países y regiones donde no está presente la fe cristiana, será también quien convierta la Obra misional en Pontificia, quien establezca la organización de una gran Exposición misionera, quien cree el Museo de las Misiones. De modo especial nos interesa recordar que es el papa que nombra a los primeros seis obispos chinos en el año 1926. Joaquín Peña (ver foto), formador de los candidatos chinos a ser agustinos recoletos, recoge todas esas afirmaciones sobre Pio XI en el primero de una serie de artículos que publica en Todos misioneros comentando la encíclica Rerum Ecclesiae.

El afán del papa llega por supuesto a sus representantes en los diversos países. De ahí el empeño del nuncio en China Celso Costantini para crear seminarios en los lugares de misión. Así ejerce presión constante ante el superior religioso de los agustinos recoletos para abrir un seminario menor. Los inicios son precarios por falta de medios pero en cuanto se dan mejores circunstancias comenzará a funcionar con el esfuerzo de los misioneros. Estos son los primeros en comprender, como lo expresará el mismo Joaquín Peña, en lo importante de llevar a cabo ese proyecto. En su comentario sobre el apartado sobre el clero indígena de la encíclica cita expresamente las palabras del Papa:

Ante todo, dice dirigiéndose a los Superiores de Misiones, ante todo queremos que fijéis vuestra atención en la capitalísima importancia que tiene el que los indígenas sean atraídos al estado clerical: si esto no lo procuráis con todas vuestras fuerzas, no solamente juzgaremos que es manco vuestro apostolado, sino que también creeremos que sirve de rémora a la constitución u organización de la Iglesia en esas regiones, poniendo obstáculos a su acción
(Todos misioneros 1930).

Para cumplir la decisión de incorporar a los misioneros como ministros a los mismos chinos uno de los pasos será erigir seminarios mayores regionales. En la provincia de Henan se erige un seminario regional en Kaifeng y entre los primeros que se adhieren a ese proyecto son los recoletos. En ese seminario estudiarán algunos de los futuros agustinos religiosos chinos. Fue construido en 1930, financiado por la Sagrada Congregación para la Propagación de la Fe de la Curia Romana (Fotos). Aunque fue clausurado como seminario en 1958 el edificio se ha mantenido en pie hasta el presente. La entrada fue demolida en 2018, pero era una ampliación posterior del edificio.

Joaquín Peña
Gregorio Li y Lucas Yuo en un colegio de Pamplona
Seminario regional en Kaifeng