Asamblea de Estados Unidos. Agustinos Recoletos. California, marzo 2024.

Del 19 al 21 de marzo se han reunido en Oxnard (California) 28 de los 41 religiosos que pertenecen a la Vicaría de Estados Unidos de la Provincia de San Nicolás de Tolentino de la Orden de Agustinos Recoletos, convocados y acompañados por el prior provincial.

A toque de campana, así es como se ha desarrollado la Asamblea de los religiosos agustinos recoletos en Estados Unidos. El encargado de llamar a quienes van a reunirse es uno de los participantes mayores, Anthony Torretti. Su familia, junto con la de Michael Stechmann, participante también, donaron hace años una bien timbrada campana de nombre “Santa Rita”. A su tañido, todos se apresuran hacia la capilla, el comedor o la sala de reuniones, según marque el horario comunitario.

Las Asambleas llevan ya tiempo incorporadas al sistema de gobierno de los Agustinos Recoletos. El prior provincial convoca a los religiosos de una determinada área geográfica para analizar la situación de los ministerios y comunidades de la zona en cuestión.

Hay un orden del día y una lista de asuntos propuestos que, además, las comunidades han tratado previamente por separado. A la Asamblea asisten todos los religiosos que lo desean, con la única salvedad de que algunos han de quedarse en las comunidades para seguir atendiendo los ministerios.

Fray Carlos González, actual prior provincial de la Provincia de San Nicolás de Tolentino, ha descrito las asambleas en sus cartas de convocatoria de “profundo proceso de discernimiento y diálogo”. Se trata de la misma dinámica sinodal en curso hoy en la Iglesia.

A pesar de tener un carácter consultivo, la Asamblea puede proponer a los superiores mayores la adopción de medidas sobre asuntos organizativos: priorización de necesidades, definición de presencias geográficas o de áreas de servicio a la Iglesia, dedicación de religiosos a servicios concretos para reforzarlos o mejorarlos, reestructuración de ministerios…

En Estados Unidos la Asamblea ha tenido lugar del 19 al 21 de marzo, en vísperas de la Semana Santa y a partir de la solemnidad de San José, patrono y protector de la Orden, en Oxnard, población costera de 200.000 habitantes a unos 90 minutos de Los Ángeles.

La mayor parte de las comunidades del país se dedican a la actividad parroquial; algunas de las Parroquias cuentan con centros educativos; y existe también un convento con diversas funciones. La amplitud y variedad de sus instalaciones le hacen el centro apropiado para los encuentros intercomunitarios (ejercicios, formación permanente, celebraciones carismáticas o esta misma Asamblea) y también es la residencia asignada para los religiosos mayores y enfermos.

Cuenta con algunas habitaciones especialmente preparadas para religiosos de movilidad reducida, pero además es la comunidad-referencia para los religiosos en situación de dependencia atendidos en la cercana casa de salud Mary, Health of the Sick, de las Siervas de María en Newbury Park.

A la Asamblea han acudido 28 de los 41 religiosos agustinos recoletos presentes en esta Vicaría, que tiene nueve comunidades repartidas por tres áreas geográficas: seis dentro del gran Los Ángeles en California, dos comunidades en la Costa Este (en Nueva York y Nueva Jersey) y una comunidad en Nuevo México.

Presidió la Asamblea el prior provincial, Carlos González, hasta allá desplazado para la ocasión y que previamente había mandado el temario de cuatro capítulos centrales sobre otros posibles: cuidado de los religiosos ancianos y enfermos; formación permanente y acompañamiento; JAR y promoción vocacional; reorganización de ministerios.

La forma de trabajar tuvo como base la discusión de cada tema en pequeños grupos  –aleatorios, por lo general, aunque también, en algún momento, por comunidades– y la posterior puesta en común de las conclusiones ante el plenario de la Asamblea. Hubo buen ambiente y general provecho.

Hubo dos acuerdos de especial aceptación. El primero reseñaba la satisfacción general, tanto de los afectados como del resto de los religiosos, de la atención dispensada por las Siervas de María a los religiosos en situación de dependencia, por lo que parece una solución que debe continuarse. El segundo acuerdo versó sobre el necesario reforzamiento de la pastoral juvenil y vocacional.

También llamó la atención la exposición en Oxnard de los objetos personales del venerable monseñor Alfonso Gallegos, agustino recoleto actualmente en proceso de beatificación. El vicepostulador de su causa, el agustino recoleto Eliseo González, remarcó durante la Asamblea el interés que tiene la figura y promoción de Gallegos, conocido como el obispo de los hispanos, para el apostolado en general y para la promoción vocacional.

Las Parroquias que atienden los Agustinos Recoletos en Estados Unidos son de una enorme vitalidad, tanto por el volumen de fieles, que llenan a rebosar los templos, como por la variedad de grupos y la intensa colaboración que prestan para el desarrollo de la vida de la comunidad parroquial en todos sus aspectos: celebrativo-litúrgico, formación-catequesis, pastoral general y de grupos específicos, movimientos carismáticos y servicios socioevangelizadores.

En las Parroquias predomina el elemento hispano, mexicano en su mayoría, especialmente en la ciudad de Santa Ana, que cuenta con el porcentaje de hispanos más alto de todo Estados Unidos y en la que los Agustinos Recoleto sirven en dos Parroquias.

En consecuencia, y dando por descontado el conocimiento de la lengua inglesa como la vehicular y habitual en la vida social, el español es el idioma de uso corriente, por ejemplo, en la mayor parte de las celebraciones litúrgicas.

Y, si variopinta es la composición de la feligresía, no lo es menos la de los religiosos en la Vicaría. En su lista encontramos la mayor variedad de toda la Orden de Agustinos Recoletos, con frailes procedentes de Colombia, Puerto Rico, El Salvador, Irlanda, Filipinas, Portugal, Ecuador y España, además de los nacidos en el propio país.