Del 20 al 25 de noviembre, convocados por el Secretariado general de formación inicial y vocaciones, los promotores de la Orden se reunieron en el Seminario Santo Agostinho en Maringá, Paraná, Brasil. Durante estos días el trabajo se centró en dos grandes focos: la formación y la evaluación y proyección del trabajo realizado y por realizar en los próximos años.
Comenzamos el encuentro y el trabajo con una lectio divina, en la cual oramos, meditamos y contemplamos la vocación de Moisés; nosotros, al igual que Moisés, nos descalzamos, como signo externo de estar pisando el terreno sagrado del misterio de la vocación.
La formación fue guiada por el presbítero Alexis Rodríguez, costarricense y asesor en el área vocacional de la Conferencia Episcopal de Costa Rica y del CELAM. En esta formación hemos profundizado en el cambio cultural en el que vivimos, además de profundizar en elementos necesarios para el discernimiento y el acompañamiento, iluminados por la Palabra de Dios y el Magisterio de la Iglesia.
La parte final del encuentro evaluamos los materiales e instrumentos con los que trabajamos el servicio de animación vocacional. Las diferentes provincias presentaron su trabajo, sus desafíos y sus sueños para, finalmente, programar el trabajo de los siguientes años. También hemos querido apostar por el proyecto inquietar, que es la presencia del servicio vocacional de la Orden en el continente digital.
No faltaron, también, los momentos de encuentro: tuvimos la oportunidad de orar tranquila y sosegadamente. La comida y la sobremesa nos dieron momentos de comunidad, entre risas y lágrimas compartíamos nuestras experiencias del día a día. Tampoco podíamos dejar de lado el deporte y la recreación, con apasionantes partidos de fútbol, excursión por la ciudad y tiempo libre.
No cabe duda de que estos días fueron tiempo de gracia para los promotores y la pastoral vocacional; nos vamos recargados de energía e ilusión para continuar con el servicio, sin olvidar que nosotros sólo somos los intermediarios; el que llama es el Señor.