Antiguo convento recoleto de Intramuros. Manila, Filipinas.

En febrero de 1945 quedaba aplastada bajo el peso de las bombas, tras 337 años de historia, la casa madre de la Provincia de San Nicolás de Tolentino de los Agustinos Recoletos. Este es un homenaje y tributo de gratitud a quienes construyeron esta emocionante historia comunitaria, dentro de las celebraciones del IV Centenario (1621-2021) de esta Provincia religiosa.

La escena se repetía con frecuencia, y siempre resultaba emocionante: cada barcada de misioneros agustinos recoletos procedentes de España, al llegar a Manila (Filipinas) tras meses de navegación, recorría la ciudad en procesión hasta hacer su entrada en la iglesia de San Nicolás de Tolentino. Y allí, junto con la comunidad conventual, cantaban todos juntos un Te Deum de acción de gracias porque habían llegado sanos y salvos a la “Casa Madre” de la Provincia.

Así fue durante siglos, desde el año 1608 en que se echaron los cimientos de este convento hasta su destrucción en 1945, hace ahora 75 años. Intramuros –como se conocía familiarmente a esta comunidad en su espacio físico y en tanto que grupo humano– era el punto suspirado de arribada de las 140 misiones recoletas que llegaron a Filipinas con religiosos agustinos recoletos procedentes de los conventos de España, voluntarios a las misiones de Extremo Oriente.

Intramuros fue también el centro organizativo, casa común, espacio de reposo y curación para los más de 2.000 religiosos que trabajaron en aquel Archipiélago durante 337 años; así como su sede institucional y ámbito de toma de decisiones durante 324 años, como curia provincial, residencia del prior provincial y ámbito de encuentro con su Consejo.

Luis Aguirre (1913-2007) y Miguel Navarro (1911-2013) fueron los dos últimos agustinos recoletos que llegaron a vivir en Intramuros, y han estado entre nosotros hasta no hace mucho tiempo. Fueron los últimos que experimentaron el calor familiar de aquel hogar materno.

Esta memoria agradecida y llena de sentimiento que presentamos quisiera ser un leve soplo que avive los rescoldos e impida que aquel calor se desvanezca del todo.

NOTA: Las imágenes del antiguo convento de Intramuros las podemos hoy disfrutar porque se encuentran en el Archivo General de la Orden (AGOAR), situado en la curia general de Roma (Italia). Para las imágenes relativas a la Batalla de Manila, hemos contado con el archivo público del Presidential Museum and Library PH. El resto de imágenes de este reportaje corresponden al Archivo Gráfico de la Provincia de San Nicolás de Tolentino de la Orden de Agustinos Recoletos.

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