Participaron 350 jóvenes de parroquias de la zona centro de México

Alrededor de 350 miembros de las Juventudes Agustino Recoletas (JAR) participaron en el II Encuentro Nacional JAR, que tuvo lugar los días 24 y 25 de abril en el Colegio Fray Luis de León de Querétaro (México).
En el programa de actos se incluyó deporte, recreación, oración y un festival con canciones y representaciones. La eucaristía del domingo 25 fue presidida por el Vicario de México, Sergio Sánchez, y concelebrada por los agustinos recoletos de cuyas parroquias habían asistido jóvenes.
Se marcaron dos objetivos para este encuentro: convocar a los jóvenes de nuestros ministerios para integrarse en los grupos juveniles y favorecer el conocimiento y la convivencia entre ellos, para crear la conciencia JAR por medio del deporte, la música y la oración. Ambos objetivos se cumplieron.
El deporte sirvió de motor de arranque. La Olimpiada JAR se caracteriza por los deportes que la componen. No son muchos, pero sí muy solicitados: fútbol, voleibol, baloncesto y atletismo. Algunos ministerios venían uniformados y bien preparados.
Acabada toda la actividad deportiva, llegó el rally, organizado por el grupo juvenil del colegio Fray Luis. Las distintas pruebas cumplían una parte de los objetivos: la mayor integración de los grupos juveniles.
No sólo hubo juegos y deporte, también momentos de encuentro de oración. A las diez de la noche comenzó la vigilia. Se inició tras el calor de una hoguera encendida en una noche de pascua.
Carlos Briseño, prior de la comunidad, compartió el significado que para los agustinos recoletos tiene esa noche: la conversión de san Agustín. Con la ayuda de algunos textos, se recorrió la vida de nuestro Padre, hasta llegar a la procesión. Una procesión hacia el auditorio, en la que cada joven portaba un cirio recordando que debemos ser luz allá donde estemos.
El auditorio estaba presidido por una gran cruz de arena, donde se pusieron los cirios. La luz y la cruz; la cera y la arena. Toda una mezcla de elementos para encontrarse con Jesús, a través de su Palabra, de la canción y los gestos. Rafael Moreno, compositor y colega del grupo Dynamis que preside Martín Valverde, animó la noche.
El domingo por la mañana se tuvo el espacio “Así somos”. Todos los jóvenes tenían que mostrar a través de fotos, carteles, escritos, el trabajo de su grupo en su comunidad parroquial o en el colegio. Fue como una carta de presentación de cada parroquia. La creatividad y la constancia de algunos de nuestros ministerios destacaron. El tiempo de descanso del festival de la canción juvenil se aprovechó para ir viendo esta buena exposición.
La eucaristía estuvo presidida por Sergio Sánchez y concelebrada por los religiosos de la comunidad de Querétaro y los responsables de la pastoral juvenil de la zona centro. La animación del canto fue obra de nuestros postulantes y aspirantes. En ella participaron algunas familias que vinieron a compartir el día. Se quiso aprovechar la oportunidad para seguir animando a todos los jóvenes a trabajar en este proyecto juvenil.